Braña de la Pornacal

Seguimos en el Parque Natural de somiedo para adentrarnos hoy en otro de sus lugares emblemáticos, la Braña de la Pornacal: otro de los espacios de pastoreo en verano para los Vaqueiros de Alzada (pastores trashumantes) y considerada uno de los conjuntos mejor conservados de teitos de Somiedo. 

Desde Pola de Somiedo por la carretera que va a Belmonte de Miranda, encontraréis un desvío a la izquierda hacia Villar de Vildas, otro de los pueblos denominados ejemplares de Asturias. Desde el final del pueblo una pista asfaltada y de uso restringido ganadero nos lleva  recto pero en continua ascensión a la fabulosa braña, siempre acompañados por el río Pigüeña. No tiene ningún misterio más que continuar por ella hasta llegar a la cabañas de teito vegetal, dónde existe la mayor concentración de estas construcciones tradicionales, más de treinta, que bien deberían ser consideradas museo etnográfico en sí mismas.




Esta ruta de 12km os sobrecogerá por su paisaje, su tranquilidad, su silencio y su belleza, pero también por sentirse como transportado a otra época. En todo el trayecto de subida  hemos encontrado un ganadero con su mini tractor, ¡¡Nos dan ganas de hacer autoestop!!. 

Pena que algunas de las cabañas hayan cambiado su tejado vegetal por la pizarra o la teja y más aún que alguna necesite rehabilitación, lo que a veces no es posible si corre a cuenta del ganadero. Quizás en un futuro no lejano deberían ser declaradas Patrimonio de la Humanidad.


Hemos disfrutado mucho recorriendo el barrio de arriba y luego bajando al del río, fotografiando a diestro y siniestro; hoy nuestra senda termina aquí junto al río, puesto que no tenemos tiempo para más, pero los que queráis seguir caminando podéis continuar subiendo hacia la Braña Viecha, dónde os sorprenderá encontrar cabañas circulares.



También se puede realizar esta ruta desde la Peral, aldea vaqueira que se encuentra subiendo el Puerto de Somiedo, desde este pueblo las vistas son impresionantes como los picos que la rodean, pero el sendero a veces se pierde cuando descendemos hacia el valle del Pigüeña, con el agravante de tener que descender hasta Villar de Vildas para coger la carretera: más de 16km que difícilmente podríamos hacer de regreso teniendo que disponer de otro vehículo en este pueblo.

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